martes, 24 de febrero de 2015

Día V


La verdad es que estoy super contenta con la clase de este dibujo. Porque estuve muy centrada y el hacerlo con rodillo me lo hizo más entretenido porque es una técnica que me gusta mucho, Probé con diferentes tipos de "pinceladas" para las diferentes zonas. Comencé con las zonas de máxima luz, luego con las intermedias en ocre, luego gris y por último el negro y la verdad es que estoy muy conforme, Creo que tiene muchas zonas que mejorar pero que más o menos se entiende bien las zonas espaciales. Hubo zonas que por el hecho de que en el collage original eran igual de negras pero en diferentes planos las pinte así pero se me mezclaron todos así que aprendí que a pesar de estar en sombra son diferentes sombras sino se pierde profundidad. Mi último paso fue hacer detalles como personas, baradillas y los cables o cadenas que hay pero lo hice a modo de mancha para sólo dar una idea general y no que cobrase protagonismo la figura humana frente al espacio, además de que encima daba escala. Por último, el incorporar periódico o cartulinas me costó mucho porque pensaba que iba a estropearlo y que a lo mejor el introducir un poco de periódico en cualquier zona iba a cobrar mas importancia este trozo que el resto del dibujo. Aún así lo puse pero por encima lo pinte del color de la zona como en la escaleras de la izquierda o la estructura al lado de la puerta, así que aportar mucho collage no aportó, si acaso líneas rectas. 

Día IV


Ultimamente me cuesta mucho el tema de las sombras y luces con la barra chunky, vamos llevo ya días así pero tengo que decir que me cuesta menos identificar zonas de las luces y que grado de luz tienen. Lo que me cuesta más es representarlo porque llega un punto que lo hago todo del mismo blanco y se mezclan zonas. Creo que la única zona que se entiende bien que esta en diferentes planos es la parte izquierda con la puerta y el fondo semi-iluminado pero en cambio la derecha me quedó demasiado plana. Es mas difícil, para mí, determinar estas zonas con la barra chunky porque aunque estoy ya mas que acostumbrada a utilizarla, por su grosor no se pueden hacer pequeños detalles. 
Al principio comencé de una manera totalmente diferente y empecé a meter negro para ensombrecer las zonas más oscuras como la columna central o la estructura encima de la puerta pero fue un error así que pasé el trapo y a empezar otra vez y, sinceramente, creo que no hubiese conseguido esto sin pasarlo porque hubiese quedado menos claro (a pesar de que hay muchas partes inacabadas ). 

miércoles, 18 de febrero de 2015

Finde II

Y allí estaba, en medio de una plaza después de haber pasado todo tipo de desdichas solo por querer encontrar la ciudad de los Inmortales. Había soportado sed, calor, muertes, todo tipo de males en aquel desierto. ¿Y todo porque? Por querer encontrar la ciudad... ¿Para qué? ya ni me acuerdo...
Al final tantos días, años... lo que fuese en el desierto me habían dejado sólo llegando a ni sabía dónde ya que mi caballo había decidido por mí. Lo que sí que recuerdo es cuando me levante maniatado aquella mañana, en el suelo tirado y de fondo vi unos muros oscuros sin puerta ninguna: la ciudad de los Inmortales. Había un riachuelo del que me falto tiempo para beber y después me percaté de la existencia de unos seres grises que salían de cuevas para cazar serpientes. Después de este descubrimiento, empezó mi investigación sobre la ciudad dónde no existía ninguna puerta de entrada pero acabe descubriendo unas escaleras que me dirigieron a un laberinto de cámaras redondas y muchas puertas que llevaban a salas iguales una y otra vez.
Y así pasó el tiempo hasta que me encuentre en la ciudad, a la luz del día y sus construcciones me rodeaban. Estaba quieto, con los ojos cerrados disfrutando de la luz del sol, luz que ya ni me acordaba de cómo era sentir los rayos en mi cara. De repente, escuche pasos. Abrí los ojos rápidamente como esperando encontrarme a alguien a mi lado, mirándome y que fuese a decirme algo explicándome donde estaba. En cambio, me encontré sólo de nuevo enfrente de la gran ciudad y lo único que alcance a ver cuando abrí los ojos fueron unas piernas que corrían mientras desaparecieron detrás de una esquina. No sé muy bien porque actué así pero corrí detrás de esa persona, no sé si por desesperación de contacto humano o por sencilla curiosidad pero me puse a perseguirle. Detrás de esa esquina hubo otra, y luego otra y así perdí la cuenta de cuantas era, parecía todo de nuevo el laberinto pero en vez de nueve puertas solo había esquinas. Pero yo seguía, ya no sabía si a alguien de verdad, a una imaginación de cabeza o al eco de lo que podía haber sido una persona que había perdido hace mucho tiempo. Pero seguí hasta que al ver la siguiente esquina que tenía que girar estaba iluminada por algún tipo de luz y eso me hizo correr más deprisa.
 
Lo que me encontré al girarla una sala enorme, recuerdo que lo primero que me vino a la cabeza fueron los puertos de barcos, con un rayo de luz que iluminaba el centro pero no alcanzaba a ver de dónde venía. Me acuerdo que vi hubo encima de un arco y pensé que a lo mejor esa persona que había estado persiguiendo me esperaba ahí, sin tener razón alguna para explicarme el sentido de aquella ciudad. Busque la subida con la mirada pero solo conseguía ver escaleras unidas entre si y a diferentes niveles pero ninguna llegaba hasta el suelo. ¿Cómo pretendían los Inmortales que alguien pudiese subir hasta allí si nadie llegaba a empezar a subirlas? ¿Y si eran mucho más altos que yo? ¿Y si podían volar? Y así, miles de preguntas absurdas más que me hicieron perder más del tiempo que me sobraba mientras que subía las escaleras y pasaba por debajo del enorme arco. No sé qué paso exactamente ese momento, mientras iba yo caminando y pensando sobre estos temas sin importancia pero en cuanto me fije donde estaba había salido por la puerta de varios metros de altura que recordaba que estaba en el segundo nivel. No sabía ni como lo había hecho, recordaba subir los escalones de debajo del arco pero no tantos como para haber cogido una escalera contigua sin haberme dado cuenta… no entendía nada pero mis deseos se habían cumplido realidad porque solo tuve que andar pegado a la pared unos metros y llegar hasta la humareda.

Lo prometo. Prometo que vi otra vez esas piernas que corrían, es como si esperase a que llegase yo para echar a correr y que no alcanzase a ver más que dos piernas (si es que eran eso, y no me lo estaba imaginando). Recuerdo que salió corriendo por la barandilla que recorría el segundo piso y yo detrás. Me acuerdo de salir de esa salir de esa sala mientras los enormes pilares pasaban rápidamente a mi lado y yo miraba como con añoranza las escaleras que había en los pisos superiores, como pensando que nunca más las iba a volver a ver y no las había recorrido ni siquiera una vez.


Corrí por esa barandilla kilométrica hasta que no pude más, mi cuerpo ya no tenía energía y yo necesitaba comida y agua, que a saber donde encontraba yo eso es aquella ciudad ruinosa. Estaba yo haciendo el amago de sentarme a descansar cuando vi unas sombras con forma humana, estaba demasiado lejos como para ver que eran pero en cuanto me di cuenta mis pies corrían solos. Cuando llegue ahí, otra desilusión, eran estatuas, humanas, pero estatuas. Mire a mí alrededor ya que el paseo desde el que me encontraba me permitía ver todo desde cierta altura y lo que vi me horrorizo porque aquella sala estaba llena de estatuas humanas pero eran tan perfectas que casi parecían seres humanos petrificados.


Después de acostumbrarme a su “compañía” decidí bajar por los escalones que había debajo de mi y no sé si es por estaba más alto de lo que pensaba o de que aquellas escaleras no eran normales pero para cuando llegue abajo tenía los pies destrozados de tanto bajar escalones y sobretodo porque eran tan pequeños que no me cavia el pie y me iba clavando las aristas todo el rato.


Seguí recorriendo tranquilamente la planta baja, volví a subir a la segunda, investigué niveles superiores… hasta que cuando me iba a echar a descansar al lado de una enorme piedra que había en el piso bajo vi que en las cristalera que había en el fondo había un hueco oscuro, parecía el lugar donde había estado una puerta así que pensé: ¿Por qué no? No tenía tiempo que perder, total, tenía todo el del mundo.


Cruce aquel umbral y lo que me encontré me dejo con la boca abierta, literalmente.


Está en el centro de dos caminos, todos ellos vigilados de cerca por enormes leones de piedra. En el centro, en la esquina que formaban las maderas del segundo piso había como una estatua de una persona rezando o pidiendo algo hacia el cielo. Una vez más, las personas eran de piedra y empecé a tener cada vez más claro que esa personas había tenido vida alguna vez porque era todo tan real, movimiento tan veraces que eso solo podía ser así si alguien los hubiese convertido en piedra mientras trabajaban.
Recuerdo que los leones me hicieron sentir el ser más pequeño del mundo, te miraban tan desafiantes, tan fieros, como si estuviesen vigilando como un gran tesoro las piedras que separaban uno del siguiente. Lo segundo que recuerdo que me llamo la atención fueron los enormes arcos que había por encima, arcos sin función ninguna, a medio construir (o destruir, no lo tenía claro) y como dejaban pasar una luz del sol, que una vez mas no alcanzaba a ver de dónde venía.
Lo tercero que recuerdo fue que en aquella sala no me moví absolutamente nada para ver cómo era todo como había hecho en las anteriores, sentía que no debía moverme hasta haber tomado la decisión de que camino coger, el de la izquierda o el de la derecha. Lo mire todo con detenimiento, intente ver el final de ambos caminos y a veces hasta hubiese jurado que los leones giraban un ojo para mirarme y ver si escogía su camino.

No sabía qué hacer… sentía como que era una de las decisiones más importantes de mi vida, como si mi futuro dependiese de ello. ¿Y si alguna me devolvía a casa? No fue buena idea pensar eso porque empecé a respirar rápidamente y mi corazón no estaba ya como para esas emociones. Después del pequeño mareo que me entro, conseguí recuperarme y una parte de mi cabeza decidió sin argumento ninguno que el camino de la izquierda.


Empecé a andar y a andar, los leones iban cerrándome el camino detrás de mí para que nunca jamás pudiese volver. Al final de todo me encontré una puerta pequeña de madera, casi me tuve que agachar para pasarla.


Lo siguiente fue la intensa luz del sol otra vez. Estaba otra vez en la plaza pero ya no había esquina por la que entrar y había desaparecido la puerta de salida.


Sigo pensando, aun ahora, que si escogí el camino correcto…

domingo, 15 de febrero de 2015

Día III


Después de estar un poco desmotivada del día anterior porque tengo la sensación de que me está costando mucho hacer decentemente las cosas de clase empezar con esto me encantó y me motivó otra vez. No creo que sea un dibujo estupendo ni que me haya salido perfectamente pero me quedó con lo bien que me lo pasé haciéndolo con la cinta de carrocero y los acrílicos, porque primero la técnica me gusta y luego pintar con cinta de carrocero es probar algo nuevo que hace que quede diferente el dibujo además de que las rectas salen rectas (cosa que me cuesta bastante). En resumen, la clase me gustó mucho por todo y aunque creo que puedo mejorar mucho más y que no me dio tiempo a acabarlo la verdad es que me lo pasé muy bien. 

Día III




La verdad es que esta clase no me salió muy bien. intenté concentrarme y que me saliese pero tampoco hubo mucha suerte. Al principio lo de la trama de líneas que hacía de base se me mezclo todo y ya no supe donde iba que, así que a volver a empezar. Luego más o menos, después de conseguir la base intenté rellenar los espacios pero se me acabó el tiempo e hice lo que pude pero no muy bien. Luego el segundo, por lo menos la primera trama de líneas rectas y estructuras fundamentales me salió mejor pero al pintar las luces y todo pues mas o menos las sombras y luces generales si que conseguí hacerlas pero en cuanto entraron medios tonos ya se me empezó a mezclar todo porque me cuesta mucho conseguir las zonas que no son luz o sombra extremas. Como punto positivo tengo que decir que tuve la sensación de hacerlo mejor que la primera vez que hice esta imagen con luces y sombras pero me cuesta mucho conseguirlo y darle profundidad a la vez porque se me queda todo con el mismo tono y parece lo mismo, pero seguiré intentándolo. 

jueves, 12 de febrero de 2015

Finde I

Y allí estaba, en medio de una plaza después de haber pasado todo tipo de desdichas solo por querer encontrar la ciudad de los Inmortales. Había soportado sed, calor, muertes, todo tipo de males en aquel desierto. ¿Y todo porque? Por querer encontrar la ciudad... ¿Para qué? ya ni me acuerdo...
Al final tantos días, años... lo que fuese en el desierto me habían dejado sólo llegando a ni sabía dónde ya que mi caballo había decidido por mí. Lo que sí que recuerdo es cuando me levante maniatado aquella mañana, en el suelo tirado y de fondo vi unos muros oscuros sin puerta ninguna: la ciudad de los Inmortales. Había un riachuelo del que me falto tiempo para beber y después me percaté de la existencia de unos seres grises que salían de cuevas para cazar serpientes. Después de este descubrimiento, empezó mi investigación sobre la ciudad dónde no existía ninguna puerta de entrada pero acabe descubriendo unas escaleras que me dirigieron a un laberinto de cámaras redondas y muchas puertas que llevaban a salas iguales una y otra vez.
Y así pasó el tiempo hasta ahora, que me encuentro en la ciudad, a la luz del día y sus construcciones me rodean:

primera imagen: la de los leones, que impacta mucho al personaje primero por su enorme tamaño y luego por los hombres trabajando en nivel superior, hombres muy pequeños pero que intenta alcanzarlos por una escalera que le lleva a diferentes niveles (los de los laterales) que siempre los ve pero sube y baja sin sentido hasta que uno de esos caminos le lleva a la segunda imagen.

segunda imagen (escalera de madera): aquí lo primero que ve son los bloques de piedra enormes y flotantes formando la escalera, va subiendo pero los escalones se van pegando mas y mas a la pared así que no puede llegar al castillo, decide bajar y subir por las escaleras que se ven al fondo del arco pero son de un tamaño minúsculo, no es que estuviesen cerca es que son muy pequeñas para él.  Continua  andando hacia el fondo, por los sitios donde cabe y va a parar a la tercera imagen.


tercera imagen (hombres y arco en primer plano)al pasar un arco se encuentra una sala cubierta de arcos enormes con construcciones de madera construidas en los laterales. Lo primero que ve, al margen de las construcciones de madera son estatuas humanas de tal realismo que parecen hombres congelados. Sube por las escaleras del fondo, en el primer piso no encuentra manera de subir al siguiente así que decide escalar la cuerda que hay que sube arriba del todo.  Allí se encuentra con una construcción toda con muchas pendientes. Después de mucho consigue salir por las escaleras que encuentra (al fondo del todo) que le llevan a la plaza otra vez. 

miércoles, 11 de febrero de 2015

Día II: técnicas húmedas




La verdad es que empezar con técnica húmeda me gusto mucho, sobre todo el hecho de que fuese más gestual que racional. Al principio me costó mucho (el primer dibujo) soltarme, en plan hacer trazos más largos pero luego fue mucho mejor por lo menos para hacer el primer boceto del dibujo. No se parece mucho al dibujo real de Piranessi sino que es más abstracto pero para la próxima la intentaré. Además, el hecho de tener tres colores que se podían mezclar y conseguir muchos más me lo hizo más fácil. Pero con lo que me quedo en definitiva, es con la técnica, que me gustó mucho además nunca la había probado y creo que es muy interesante. 

Día I: empezando el segundo cuatri






Empezamos el cuatrimestre con nuestra querida barra chuncky, y problema con la tecnica no tuve, pero tengo que confesar que el tema de Piranessi y sus diferentes profundidades es bastante complicado. Pensé que con el hecho de que lo hiciesemos con barra chunky iba a hacerlo más fácil pero no lo fue. Los primeros planos no fueron complicados pero cuánto más profundizaba más difícil me pareció. De todas formas, creo que es una buena manera de aproximarnos a estos dibujos pero también el hecho de fuese solo blanco y negro, y el negro opcional por aquello de que el papel era negro, hace más complicado hacer grises y diferentes planos con diferentes luces.