El pincel abanico la verdad es que es una herramienta muy interesante, y se consigue el objetivo de que nos olvidemos de bordes. Pero también es difícil porque la huella será fácil de dejar y crear volúmenes de objetos pero en mi caso se me mezclaban todos los colores hasta que al final no se diferenciaba nada, además de que me pasaba de agua muchas veces. Los dibujos que más me gustan son el cuarto y el último porque creo que son los que más se acercan a lo que nos pedíais. Al margen del nuevo pincel también he cambiado de papel a uno especial de técnicas húmedas y eso se nota en la calidad de los colores.
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